Reflujo gastroesofágico
Gastritis y colitis
Síndrome de intestino irritable
Úlceras y pólipos
Hígado graso y enfermedades biliares
Cirrosis y pancreatitis
Debes consultar al especialista cuando presentes molestias digestivas frecuentes o síntomas que no desaparecen, como:
dolor abdominal, náuseas, vómito, acidez, diarrea o estreñimiento.
Las revisiones preventivas son clave después de los 40 o cuando hay historial familiar digestivo, como cáncer de colon, úlceras o pólipos.

Molestia o sensación de presión en el abdomen que se repite o no desaparece.

Diarrea, estreñimiento o variaciones notorias en la frecuencia o forma de las heces.

Sensación de ardor o regurgitación después de comer o al acostarse.

Malestar estomacal continuo, incluso sin haber comido en exceso.

Presencia de sangre roja o muy oscura, señal de posibles lesiones o inflamación.

Disminución notable del peso o falta de apetito sin cambios en la dieta.
En cada consulta, combinamos experiencia clínica, tecnología avanzada y un trato humano para ofrecer diagnósticos precisos y tratamientos personalizados.
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